Avanza la anexión en Washington

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| Publicado el 30 marzo 1998

Daniel Ramírez
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Bandera Roja
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Aunque apenas por un voto entre más de 400 delegados, ganó el Proyecto Young en la Cámara de Representantes de los Estados Unidos. está votación representa una victoria para el gobierno PNP y un reto para el independentismo. La votación indica que un sector de la clase dominante norteamericana está dispuesta a considerar seriamente la conversión de Puerto Rico en un estado. El Proyecto Young además tiene el apoyo de la Casa Blanca.

El Proyecto contó con 209 votos, 166 fueron demócratas y tan solo 43 republicanos. Los demócratas aludieron al llamado «derecho igual de los ciudadanos americanos en Puerto Rico». Los norteamericanos están claros en que el supuesto estado de Puerto Rico sería representado mayormente por demócratas puertorriqueños. está implica que «derechos iguales» es para dominar a los republicanos de forma partidista. Los demócratas también reciben millonarias aportaciones de los sindicatos norteamericanos, que esperan sacar millones en cuotas de los trabajadores públicos puertorriqueños. O sea, que la aprobación del Proyecto Young es en pago por la Ley de Sindicación.

Con la estadidad, Puerto Rico sería amarrado firmemente al dominio norteamericano y los puertorriqueños nos convertiríamos en una de las minorías nacionales de ese país. Si bien se argumenta en favor de los «derechos civiles» para justificar la estadidad, nuestros derechos colectivos como nación quedarían totalmente aplastados y en grave peligro. Además, está amenaza de estadidad viene en momentos en que la ofensiva neoliberal capitalista llevó a cabo ataques y recortes a los derechos y servicios sociales ofrecidos a los trabajadores y a los pobres. Con la estadidad también se consolidaría el uso militar de Puerto Rico, justo cuando los EU van a salir de Panamá.

La gran mayoría de los representantes republicanos le votaron en contra. Estos trajeron argumentos de índole político y cultural, en específico con el propósito de acabar con el idioma español en Puerto Rico. La Enmienda Burton aprobada con el Proyecto requiere que los niños de 10 años demuestren dominio del inglés e implica el forzar que ese sea el idioma de enseñanza en las escuelas. Se espera que en el Senado el debate sobre los aspectos económicos sea mayor. El ingreso per cápita de Puerto Rico sigue siendo, hoy, la mitad del estado más pobre de los EU: Mississippi. está situación constituye un fuerte obstáculo a la estadidad.

No se puede depender del trabajo de cabildeo en el congreso norteamericano para avanzar la independencia, como lo ha hecho el Partido Independentista Puertorriqueño. El PIP ha abandonado el reclamo histórico del independentismo de que el proceso de descolonización sea regido por el derecho internacional, que exige el trasladó previo de la soberanía. Ellos esperan que la independencia de Puerto Rico sea el producto de la eliminación parlamentaria de la estadidad y la colonia. Ellos esperan que la independencia sea un regalo, y no una conquista militante del pueblo puertorriqueño. El PIP juega a la ruleta rusa con el estatus con la pistola cargada en manos de imperialistas como Don Young.

Por arduo y difícil que sea, la manera segura de derrotar al imperialismo y a la anexión está en la lucha en la calle en Puerto Rico, movilizando y convenciendo al pueblo trabajador de la necesidad de luchar por sus derechos y de afirmar su nacionalidad. este es el camino para lograr que la independencia sea apoyada por la mayoría del pueblo. Es por ello qué tenemos que apoyar los esfuerzos que realicen organizaciones unitarias independentistas como el Congreso Nacional Hostosiano y el Frente Socialista, para qué en este año del centenario de la invasión norteamericana, generar luchas masivas que se conviertan en una barrera infranqueable a la anexión.

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