La activista afroamericana, Assata Shakur falleció en La Habana, Cuba, por complicaciones de salud el 25 de septiembre de 2025, según confirmaron su hija y el gobierno cubano.
Shakur, quien fue poco conocida por su nombre de nacimiento, Joanne Deborah Chesimard, murió el jueves por motivos que los comunicados oficiales han descrito como “problemas de salud y edad avanzada”.
La ex integrante del Partido Pantera Negra y veterana del Ejército Negro de Liberación (BLA, por sus siglas en inlgés) desafió la opresión sistémica con protestas, cartas abiertas, acciones directas y servicio comunitario desde su trabajo de base hasta su fuga de prisión en 1979 y su huida a Cuba, donde recibió asilo político. Según su autobiografía, junto a organizaciones que la apoyaron, Shakur fue perseguida y acusada por crímenes que no cometió. No obstante, el FBI insistió en incluirla en la lista de “los más buscados” como terrorista.
La historia de Assata ha inspirado a innumerables artistas musicales, como Common, 2Pac y Public Enemy. Sus expresiones han sido citadas por la academia junto a las de figuras prominentes de izquierda extrema como Angela Davis y Malcolm X. Movimientos como «Manos Fuera de Assata» y la organización Assata’s Daughters continúan su legado.
Descansa en poder y en libertad.
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