A pesar de New Fortress Energy (NFE) tomar como rehén una barcaza de gas natural licuado por 24 horas en el mes de julio y ser duramente criticado por los efectos que pudiera tener en un país enfrentando una crisis energética, el gobierno firmó un contrato multimillonario de 7 años con la empresa.
La gobernadora Jenniffer González habría acusado a NFE de detener el suministro de gas natural y exponer al país en su condición vulnerable para provocar apagones en un mes de mayor demanda, lo cual fue considerado como una medida de presión para la aprobación de un contrato de $20,000 millones. En ese momento, González no descartó cancelar el contrato ya que estaban en renegociación del contrato que venció en el mes de agosto y tales acciones podian representar un mecanismo en violación de contrato.
Sin embargo, recientemente el gobierno decidió firmar un contrato con NFE por 7 años y $4,000 millones para el suministro de gas.
Por su parte, la Junta de Control Fiscal no favoreció un intento anterior de $16,000 millones por considerar las cláusulas como nefastas y no velar por los intereses del pueblo. El contrato está a la espera de ser aprobado por la Junta. Al momento NFE mantiene el control total del muelle de San Juan hasta 2038.
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