El Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT) es una mega cárcel en El Salvador, inicialmente diseñada para albergar reos asociados a pandillas como la Mara Salvatrucha (M-13) y Barrio 18. La cárcel tiene capacidad para 40,000 presos, en condiciones insalubres y de hacinamiento. El CECOT no ofrece programas de rehabilitación o reinserción. Tiene una política de no contacto; los presos no tienen comunicación con sus familias, quienes muchas veces no saben en dónde están.
El gobierno estadounidense acordó con El Salvador pagar 6 millones para enviar inmigrantes que “están asociados a pandillas”, bajo la Ley de enemigos extranjeros. Estados Unidos envió sobre 250 personas, sin seguir el debido proceso de ley, y aún luego de que un juez ordenara que los vuelos de deportación regresaran al país. Se han realizado múltiples denuncias sobre los inmigrantes deportados al CECOT, como que no se ha corroborado estén relacionados con pandillas, no tienen antecedentes penales, e incluso algunos están en el país bajo asilo, o sea, de forma legal. En el último mes, el gobierno de Trump ha mencionado la posibilidad de enviar ciudadanos estadounidenses al CECOT.
La deportación de inmigrantes hacia el CECOT representa una alarmante violación de los derechos humanos como se ha denunciado publicamente: tortura sistemática, confesiones forzadas, y privación de necesidades básicas (alimentos, agua, atención medica e higiene).
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