Cooperativa para privatizar la AEE: ¿buena opción?

| Publicado el 9 diciembre 2019

José Antonio Ramos

Bandera Roja

Este pasado miércoles 27 de noviembre por invitación de la Asamblea de Pueblo de Utuado (AdPU), Ricardo Santos Ramos, expresidente de la Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego (UTIER), ofreció una charla sobre los riesgos para el país ante la posible privatización de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE).  Esta charla se dio a raíz del interés de conocer distintas propuestas sobre la energización eléctrica en el país. Santos brindó información que coloca a la Cooperativa Hidroeléctrica de la Montaña como un inviable intento más de privatización. Anteriormente la AdPU había invitado a lxs proponentes de esta cooperativa, proyecto impulsado para los pueblos de Utuado, Jayuya y Adjuntas.  

Lxs proponentes de la Cooperativa Hidroeléctrica argumentan que todas las plantas generatrices del país estarán abiertas a alianzas público-privadas.  Ante esto, consideran importante que la privatización de la energía eléctrica de estos tres pueblos esté mejor en manos de la gente a través de una cooperativa, y no a merced de intereses puramente capitalistas, como los que defiende el cabildero Luis Fortuño.  

Sin embargo, Ricardo Santos, como parte de la discusión y contestando a preguntas de la asamblea, explicó que las cooperativas eléctricas en Estados Unidos funcionan en los lugares en que las compañías privadas no han llevado el servicio.  En Puerto Rico este tipo de proyecto no tiene funcionalidad alguna, ya que “la AEE ha electrificado el 100% del país”. Santos añadió que el agua de los embalses no se puede usar todo el tiempo en la producción de energía con las hidroeléctricas.  El agua que se le provee a una parte de la ciudadanía proviene de estos embalses. El proceso de reciclaje no es la opción, pues haría la energía más cara, que es uno de los aspectos que se busca evitar.

La propuesta de la cooperativa hidroeléctrica ha provocado otras preocupaciones.  La ley 258 de 2018, que permite la incorporación de cooperativas hidroeléctricas, fue propuesta, encaminada y celebrada por Eduardo Bhatia y Larry Seilhamer.  Bhatia se ha destacado por hacer lo impensable por conseguir privatizar la AEE, a la vez que favorece intereses ajenos al bienestar del país. Y Seilhamer ha mostrado ser ese tipo de político que mientras quiere dar la impresión de buenazo, de que está con el pueblo, por el costado le da la estocada trapera.  Recordemos que fingió respaldar a la comunidad de Peñuelas en su lucha por evitar el depósito de cenizas y luego apoyó la ley para legalizar y autorizar tal barbaridad.

Otra causa de recelo es que la Cooperativa Hidroeléctrica de la Montaña formaría el consorcio Energía Renace junto a la compañía PowerSecure.  Esta obtendría el 45% de las acciones. PowerSecure está ligada a un escándalo por corrupción que involucra al Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos, según el Centro de Periodismo Investigativo.  Tras los estragos causados por el huracán María, PowerSecure cobró $29.2 millones por tareas que no pudo justificar.  

Además, como parte de la charla, Santos develó el plan sistemático que el PNP y el PPD han ido concretizando desde el poder gubernamental para destruir la AEE.  Enfatizó en cómo este plan fue concebido para desacreditarla, desmantelarla y facilitar entonces su privatización. De una corporación pública con un servicio de excelencia, que la colocó entre las primeras diez de Estados Unidos hace apenas unos quince años, la AEE ha pasado a ser una empresa pública quebrada y desprestigiada.  Personajes como José Ortiz, Eduardo Bhatia, Jorge Rodríguez, Lisa Donahue y Alejandro García Padilla, entre otro montón de personeros mal intencionados, han manchado la imagen de la corporación pública y de sus empleadxs ante los ojos del pueblo. Mientras, fueron cerrando plazas y ocasionando el deterioro de los equipos y la infraestructura, lo que la colocó en la postura de fragilidad con la que enfrentó al huracán María.   Fragilidad que no ha sido superada hasta el momento, evidentemente porque no es del interés de lxs administradorxs de la AEE y el gobierno.

Para un grupo de la población, la idea de que el control y el beneficio de la producción y distribución de la energía eléctrica esté en manos de la ciudadanía, utilizando el concepto de cooperativa, parece muy atractivo.   Sin embargo, la dinámica de la actividad dejó claro que otros sectores cuestionan y rechazan dicha propuesta. Teresa Sepúlveda, participante de la charla, señaló que no está de acuerdo con este tipo de cooperativa hidroeléctrica “porque no deja de ser una manera de privatizar la AEE y lo importante aquí es defender un bien público vital para el país”.  José González afirmó que esto “es un engaño. Lo que se pretende es recibir sobre 250 millones de dólares en préstamos en un proyecto que no va a funcionar por no ser viable ni costo efectivo, llevarse el dinero y dejar la energía eléctrica de estos pueblos ya privatizada”.  

Manuel Báez recordó que el pueblo de Utuado está pasando por la falta de servicios completos de la sala de emergencias, ya que el hospital cierra uno de sus turnos todos los días.  “El hospital es un ejemplo de lo negativo que es la privatización. Privatizar bienes públicos siempre implica la cosificación de la gente. Nos convertimos en un objeto con valor monetario para los grandes intereses”.  “A la AEE hay que defenderla, no darnos por vencidos ante el empeño del gobierno de privatizarla y ponerla en manos del saqueo y el lucro para unos cuantos”, añadió Sepúlveda.