Peor la AAA con la privatización

Foto del avatar

| Publicado el 30 noviembre 1998

José Velaz Ortiz
info@bandera.org
Colaboración
www.bandera.org

La Autoridad de Acueductos y Alcantarillados enmendó el contrato con Professional Services Group (PSG), que ha estado vigente desde 1995. El Secretario de Transportación y Obras Públicas, a cargo de la Administración de Financiamiento de Infraestructura (AFI), y los directivos de la AAA han tenido que reconocer que con el proceso de privatización con PSG no han podido resolver los problemas del suplido de agua potable y de la disposición de las aguas usadas. A pesar de ello, insisten en dicho proceso incrementando la privatización a niveles conflictivos con las leyes aplicables a la AAA, con sus fines públicos y con los derechos de los empleados de la Autoridad.

El nuevo acuerdo implica, entre otras cosas, la entrega total de todas las operaciones de la AAA no reservadas a AFI, incluyendo la otorgación de más poderes a las empresas dueñas de PSG, a saber: la «Compagnie Generale des Eaux – Sahide» y «Air Water Technologies Corporation». Se les entrega la facultad de nombrar y supervisar al Director Ejecutivo y de nombrar a todo el personal supervisor.

No cabe duda de que existen problemas de ineficiencia y corrupción en las corporaciones públicas. Sin embargo, la causa no es meramente que se trate de empresas públicas ni la solución es la privatización. La causa de tales problemas es la politiquería que ejerce el partido de turno en el poder, al nombrar a los directivos de las corporaciones públicas y al ubicar a su gente en todas las posiciones, desde ejecutivos y administrativos hasta empleados a todos los niveles, a base del criterio partidista y no a base de las calificaciones de los candidatos ni de las necesidades del servicio. Existen múltiples situaciones en cada corporación pública acerca de la frustración y desaliento que causa a sus empleados el ascenso o la llegada a posiciones de supervisión mejor remuneradas de personas cuya única cualidad sobresaliente lo es su afiliación política, así como situaciones de hostigamiento y discrimen a empleados eficientes y debidamente calificados por no pertenecer al partido de turno. Tal frustración y desaliento también ocurren cuando se conceden subcontratos innecesarios a las empresas que sufragan las campañas políticas, asignándoles trabajos que los empleados de la corporación pública podrían realizar.

Las contradicciones entre el afán de lucro de la empresa privada y la prestación de servicios esenciales a nuestro pueblo se manifiestan con mayor dramatismo según avance el proceso de privatización en la AAA y en otras corporaciones públicas. Tan reciente como estos días, la PSG limitó el horario en los oasis de provisión de agua a las comunidades afectadas por el Huracán Georges. Bajo el afán de no pagar horas extra al personal asignado a los oasis y ahorrar costos, la PSG agravó el problema de falta del preciado líquido.

Cabe preguntarse si el restablecimiento del sistema eléctrico que llevan a cabo los trabajadores de la Autoridad de Energía Eléctrica, con los costos en términos de pago de horas extra, de contratación de personal adicional de emergencia y de materiales para sustituir o reconstruir los postes y líneas eléctricas afectadas por el huracán, serían sufragados y llevados a cabo por la empresa privada. Evidentemente ninguna compañía privada asumiría ese costo, sino que solo le restablecería el servicio a quien lo pudiera pagar.

La lucha contra la privatización y también contra la politiquería en las corporaciones y agencias públicas es una lucha necesaria para evitar que los servicios esenciales al pueblo se vayan deteriorando y se conviertan en un privilegio solo para quienes los puedan pagar. En está lucha deben estar no solo los trabajadores de las corporaciones públicas afectadas sino todos los trabajadores y el pueblo en general que interese que lejos de un deterioro a su calidad de vida, la misma mejore cada día. Los afectados por la crisis no resuelta en la AAA podemos exigir una solución real a la misma consistente en derrotar la privatización y en discutir la adopción de todos los mecanismos necesarios para sacar la politiquería partidista, para garantizar un sistema que cuente con el apoyo de los empleados responsables y no politiqueros de la AAA y para funcionar a bases de criterios reales de eficiencia, productividad y sentido de servicio a nuestro pueblo.

Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.