Katherine Martínez Medina, jóven estudiante de trabajo social, salió absuelta de los cargos presentados contra ella por su participación en una protesta en el Municipio de Vieques. El tribunal aceptó archivar el caso contra la jóven quién realmente fue la víctima de un ataque vicisoso de parte de la policía mientras esta dirigía una protesta en el municipio de Vieques en defensa del acceso a la vivienda.
Katherine estudia en la universidad de Puerto Rico, forma parte de La colmena cimarrona, organización comunitaria en Vieques, liderada en su mayoría por mujeres que luchan por la soberanía alimentaria del pueblo. La líder comunitaria y estudiantil ha sido reconocida por su lucha ambiental, contra el desplazamiento y la soberanía alimentaria entre tantos otros ataques hacia nuestra gente viequense.
La jóven fue arrestada durante una protesta en la que un grupo de viequenses intentó detener una subasta de terrenos municipales. El 6 de julio del año 2023 los viequenses llevaron a cabo un piquete contra el Alcalde José A. Corcino Acevedo en protesta por la venta de terrenos ante una crisis de vivienda en el municipio. A juicio de los ciudadanos viequenses la subasta, que se llevaba a cabo frente al centro de usos múltiples en el mencionado municipio, le dio la espalda al pueblo al vender terrenos y viviendas a gente adinerada mientras hay falta de vivienda y tierras para la gente trabajadora. Los viequenses denunciaron que esta venta agravaría los problemas que crea el peligro inminente de no tener hospital ni la seguridad de un sistema de transporte.
Los reclamos de las ciudadanas viequenses incluyeron: techo digno, moratoria a la venta de propiedades, y una administración municipal que ponga al viequense primero. Durante la manifestación, la fuerza policiaca golpeó personas que ejercían su derecho a defender sus tierras. Atacaron estos sin miramiento alguno la libertad de expresión de personas que defendían lo suyo.
En específico Katherine, una de las líderes de la protesta, fue atacada por la policía al ser agarrada por el cuello para inmovilizarla y luego arrestarla. Además de Katherine, otras personas fueron atacadas y golpeadas por la Policía de Puerto Rico.Ya en la tercera vista judicial aceptaron archivar su caso con la condición de que Katherine no demandara por las acciones de las fuerzas represivas ese día, admitiendo así su bajeza, la de un gobierno abusador, injusto y parásito de nuestra gente.
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