Ataque contra CGT: Acto de terrorismo patronal contra el sindicato y todos los sectores en lucha

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| Publicado el 21 octubre 2019

Declaración Pública
Movimiento Socialista de Trabajadoras y Trabajadores (MST)

El Movimiento Socialista de Trabajadoras y Trabajadores (MST) denunció como un acto de terrorismo patronal el ataque contra las oficinas de la Central General de Trabajadores (CGT) en la madrugada del 10 de octubre de 2019. La organización socialista también señaló que el ataque con bombas incendiarias tenía el claro objetivo de llevar un mensaje de miedo para desanimar el sindicalismo militante y combativo que ha caracterizado a esta organización sindical desde sus inicios. El liderato de la CGT ha fomentado una actitud militante y combativa entre su matrícula y el sindicato ha realizado varias campañas organizativas, luchas y huelgas exitosas en los últimos años. Esta política consecuente con una visión de instrumento clasista y de lucha de los unionados y las unionadas les ha permitido crecer y fortalecerse, lo que sin lugar a dudas les ha ganado el odio de los patronos.

La CGT viene de obtener una contundente victoria luego de una combativa huelga contra la empresa Cadillac Uniforms. En este proceso de lucha la unión tuvo que enfrentar el ataque del patrono, los rompehuelgas y la seguridad privada contratada por la empresa. Sin embargo, a pesar de los ataques patronales la unión logró imponerse con firmeza y combatividad. La victoria de la CGT en la huelga de Cadillac Uniforms fue un ejemplo para la clase trabajadora del sector público y privado: si nos organizamos con un instrumento de lucha militante, democrático, consecuente y combativo podemos poner a temblar a los patronos.

Por otro lado, cabe destacar que no es la primera vez que una empresa en conflicto con la CGT contrata los servicios de Capitol Security para brindar “seguridad” y garantizar la entrada de rompehuelgas a las instalaciones. No debe extrañarnos que la campaña de miedo y terrorismo patronal sea una respuesta organizada desde la patronal y los servicios de seguridad privada. Y no sería la primera vez que estas compañías actúen como organismos paramilitares. Cabe recordar los procesos huelgarios en la UPR durante el 2010 y 2011 donde la administración y el gobierno contrataron los servicios del famoso anti-obrero Chiqui Star para romper la huelga estudiantil a palos.

La CGT también ha estado organizando y militando contra la reforma laboral aprobada por el gobierno de los ricos y la Junta de Control Fiscal. Ha estado organizando y disputando nuevos centros de trabajo controlados por uniones patronales y corporativas que cobran las cuotas de sus unionados y unionadas para pagar altos sueldos a burócratas y funcionarios mientras negocian migajas para los trabajadores y las trabajadoras de base. Estos son los sectores contra los que la CGT ha luchado históricamente, una alianza patronal, corrupta y mafiosa.

Hace décadas que los patronos y la derecha no atentaban contra un instrumento de lucha del pueblo con una acción de esta envergadura. Definitivamente, en la medida que la organización y la movilización sean más efectivas y asestemos golpes más certeros la respuesta no se hará esperar. En ese sentido tenemos que tomar este ataque como uno contra el conjunto de fuerzas que resisten las políticas patronales y neoliberales de los ricos, el gobierno y la Junta. Reafirmamos toda nuestra solidaridad con los compañeros y conmpañeras de la CGT.