Viajé a Cuba en febrero de este año. Evidentemente estos comentarios no son los de una persona experta en la situación cubana, pero tampoco los de un ignorante total. Soy socialista, maestro jubilado, esposo de una maestra también jubilada, también socialista, padre de cuatro hijas y un hijo (no, no fue buscando el varón, él es el tercero), constante lector de historia, política y literatura.
Es evidente que se discute extensamente el fenómeno Trump. Sin embargo, en muchas ocasiones los medios de comunicación más tradicionales obvian abordar las ramificaciones políticas que rodea esta figura, particularmente por la prensa. En particular, no hay suficiente atención sobre el documento titulado como “Project 2025”.
El 1ro de mayo es el día internacional de la clase obrera. Es la fecha reconocida en todas partes del mundo en la que se recuerdan las luchas de los y las trabajadoras por adelantar nuestros derechos y construir una sociedad más justa en la que se gobierne por y en favor de los intereses de la clase obrera. En Puerto Rico, desde 1899, se han organizado manifestaciones obreras alrededor de esta fecha. Esta tradición de lucha, enmarcada en un contexto internacional ha ido desarrollando con altos y bajos la conciencia de clase de nuestro pueblo trabajador.
En tan solo días los casos de feminicidios y violencia de género aumentan casi en tiempo récord pero el gobierno prefiere lavarse las manos y politiquear para hablar de campañas, obra y resultados. Se hace necesario un repaso de los hechos y de la respuesta del Estado que solo intenta buscar excusas que le eximan de responsabilidad.
La Federación de Maestras y Maestros de Puerto Rico, FMPR, consiguió hace unos años ya los endosos necesarios para solicitar elecciones sindicales para representante exclusivo. Hay que señalar que el magisterio se desbordó endosando dicha iniciativa, consiguiendo en poco tiempo muchos más de los endosos necesarios. La Ley 9-2021 sorprendió al magisterio al negar el derecho tener una verdadera representación exclusiva, prohibiendo las elecciones sindicales.
Acudieron a la policía por ayuda y no estuvieron seguras: 2 casos de violencia de género que sacudieron al país en una semana
El escenario político y económico de Puerto Rico es uno marcado por el racismo capitalista. A este capitalismo sistemático se le nombra colonialismo de asentamiento, y es lo que nos afecta a les boricuas.
La administración ha cerrado programas académicos o los ha puesto en moratoria, ha dejado caer la planta física y los predios agrícolas en un marcado y acelerado deterioro, que junto a la más que alarmante baja en la matrícula, siguen anunciando el fin de la UPRU. Llama la atención, hasta ahora, el silencio de parte del profesorado, los sindicatos y el estudiantado del recinto.
Ante la erosión de apoyo electoral del PNP y el PPD, el Proyecto Dignidad se presenta como una tercera opción al servicio de los intereses multimillonarios. Una especie de Plan C para un gran sector de las burguesías local y norteamericana.
José González Freyre, el capitalista millonario y convicto federal ha sido imputado de violar la Ley 54, al agredir físicamente a su esposa. Según el medio noticioso Noticel “Investigación confirma que el presidente de Pan American Grain, José González Freyre, golpeó a su esposa en distintas partes del cuerpo, el pasado 24 de febrero[…]”. Gonzalez Freyre ha sido la persona detrás de los intentos de privatización a los accesos a las playas en el área de Arecibo.
La empresa generadora de energía eléctrica a base de la quema de carbón, AES, ha logrado obtener $7 mil millones en contratos en el último año mientras el pueblo paga las consecuencias de las cenizas junto con la deuda que ha generado la empresa. Un nuevo plan fiscal pretende sacar $185 millones del bolsillo de los consumidores. Aún cuando el contrato de la empresa AES vence en el 2027, los altos ejecutivos de la conocida carbonera obtendrán otro rescate económico millonario otorgado por los gobiernos de turno.
Resumen de eventos importantes a nivel global en las últimas semanas