El socialismo sí convence, el socialismo sí organiza, y el socialismo sí moviliza

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| Publicado el 2 mayo 2012

Discurso pronunciado ante la marcha del Primero de Mayo de 2012

Cientos participan de marcha convocada por el MST

Mié, 2012-05-02 08:33
Hugo J. Delgado-Martí
Movimiento Socialista de Trabajadores

“Trabajadores: la guerra de clases ha comenzado. Ayer, frente a la fábrica McCormik, fusilaron a los obreros. ¡Su sangre pide venganza! ¿A quién le queda duda ya que los depredadores que nos gobiernan están deseosos de sangre trabajadora? Pero los trabajadores no somos un rebaño de ovejas. ¡Al terror blanco respondamos con el terror rojo! Es preferible la muerte que la miseria. Si fusilan a los trabajadores, respondamos de tal manera que los amos lo recuerden por mucho tiempo. Es la necesidad lo que nos hace gritar: ¡A las armas!. Ayer, llorábamos a los fusilados, mientras que en las mansiones de los ricos se llenaban copas de vino caro y se brindaba a la salud de la policía y los rompe huelga… ¡Sequen sus lágrimas, los que están sufriendo! ¡Demuestren coraje, esclavos! ¡Levántense a luchar!” Interpretación libre de un boletín que escribió Adolf Fisher, tipógrafo anarquista y uno de los mártires de Chicago.

El primero de mayo del 1886 precisamente en Chicago se lanzaron a la huelga cientos de miles de trabajadores para luchar por la reducción de la jornada laboral a 8 horas. Esta lucha desató una confrontación para nada pacífica entre los trabajadores y los representantes de la burguesía, o sea los rompehuelgas, la policía, y el estado. Pero no se conformaban con la jornada de 8 horas, sino que esta consigna era parte de una lucha ulterior: la conquista del total y absoluto poder político por de la clase trabajadora. Desde entonces, el primero de mayo es la fecha cumbre de los socialistas y los anarquistas. Por ello el Movimiento Socialista de Trabajadores se da cita en el día de hoy, aqui frente a la Fortaleza símbolo de los 500 años de coloniaje y del gobierno de los ricos, para denunciar el capitalismo como culpable de la crisis y promoviendo el socialismo como única alternativa para resolverla.

Es hora que los socialistas retomemos la calle y promovamos las alternativas y propuestas a los problemas que día a día nos aquejan. Pero esas soluciones tienen que partir de la crítica al sistema capitalista y colonial en que vivimos. No se trata de promover meras reformas o parchos al Estado Libre Asociado, se trata de aprovechar las preocupaciones de la gente para poner de manifiesto el carácter clasista del gobierno de los ricos, y plantear alternativas que sirvan en el desarrollo de la conciencia de clase de la gente.

Por ejemplo, las escuelas pública se encuentran bajo la amenaza de una ley federal llamada “que ningún niño quede rezagado” que en realidad debería llamarse “que todas las escuelas se privaticen”. Luego de años de desprestigio de la escuela pública, de ausencia de recursos para los maestros que ayuden a brindar una educación de calidad, y en donde los problemas de planta física que afectan el aprovechamiento académico no se resuelven, en donde las decisiones se toman de forma anti-democrática y el ambiente es uno hostil hacia el maestro; alli se prentende hoy echarle la culpa a los propios maestros y al sistema público. La realidad es que son los fondos federales los culpables de la crisis de la educación en Puerto Rico pues crean las condiciones para la corrupción. Advertimos hoy que las escuelas charter son otra forma de marginación: por un lado privatizan la educación lo que la hace inaccesible al pueblo, y en segundo lugar aumentan las divisiones de clase entre las escuelas poniendolas a competir unas con otras. Con las charter, la clase magisterial perdería de golpe y porrazo todos los logros, conquistas y victorias que alcanzaron tras años de lucha y sacrificio. Es por ello que hoy tenemos que luchar en defensa de la escuela pública. Pero el instrumento de lucha de los maestros contra la privatización de las escuelas no es otro que la Federación de Maestros de Puerto Rico. Los ataques que ha recibido el sindicato como el despido del liderato, la eliminación de los descuentos de cuotas, las demandas económicas de la Asociación de Maestros y los ataques a la imagen del sindicato tienen sus raíces en que dicha organización no ha claudicado en la lucha por la defensa de la escuela pública. Nos sentimos orgullosos de contar con compañeros y compañeras como Rafael Feliciano, María Meléndez, Darnes Fernández, Angelita Figueroa, Pedro Pastrana, Juan Santos, Luis Santiago, Jorge Bertin Meléndez, Emil, Magali Cardec, Edwin Morales, Mercedes Martínes, Luis Ángel Torres, Manuel Boigues y muchos otros quienes al día de hoy, y a pesar de toda adversidad, siguen firmes en la lucha por una educación pública, gratuita y de excelencia. A todos ellos mis respetos.

Luchamos, también, por una universidad para el pueblo trabajador. De nada le sirve a la clase trabajadora una universidad autónoma y democrática donde solo estudien los hijos de los ricos, que es hacia lo que se dirige la UPR con sus aumentos en matrícula, con sus cierres de cursos y secciones, y con su reducción en el total de estudiantes. Los ricos ya tienen las puertas de la Universidad abiertas de par en par. Están tan abiertas que sólo el 60% de los estudiantes en la UPR utilizan las ayudas económicas del estado, mientras que en las universidades privadas representan el 80%. Cuando decimos universidad abierta para el pueblo trabajador estamos hablando de dos cosas principalmente, en primer lugar que los costos de matrícula estén ajustados a los ingresos familiares, o sea que el que más tiene pague más, y que se establezca una política de admisión universitaria que privilegie a los sectores de clase trabajadora.

Ante el auge en la criminalidad, producto del trasiego de drogas, hacemos responsable al gobierno federal que son quienes controlan los puntos de entrada al país. Son ellos los que han fracaso en la llamada guerra contra las drogas, que no ha sido otra cosa que una guerra contra nuestros caseríos y barriadas, una guerra contra la juventud puertorriqueña pero que no ha atacado a los verdaderos capos de la droga que es la misma burguesía que nos oprime. Son ellos los que financian el trasiego de drogas y armas en el país. El gobierno federal es cómplice del narcotráfico, pues es la aduana federal la encargada de los puertos, es la guardia costanera junto a la marina de guerra quienes supuestamente vigilan nuestras costas. Si a nivel local tomamos las riendas de nuestros puntos de entrada controlando el mercado de las drogas por la oferta; podemos despenalizar entonces el consumo de drogas. De nada sirve encarcelar gente por sus vicios. El estado debe proveer también centros de desintoxicación voluntarios para aquellos que quieran salir de los vicios como la heroina. Pero si no resolvemos los problemas sociales que crean las condiciones para el uso y abuso de las drogas como es el desempleo o la marginación social; las drogas serán un eterno problema.

Los socialistas estamos también en contra de la opresión y explotación de la mujer, en especial contra la violencia machista. Promovemos la educación con perspectiva de género en las escuelas, nos oponemos a la doble jornada y por lo tanto creemos en la remuneración del trabajo en el hogar. La crisis social que vivimos es producto de las condiciones de vida que el capitalismo creó, privilegia el trabajo fuera del hogar y penaliza a quienes decidan cuidar a sus hijos e hijas. Es por ello que es imperativo la creación de centros de cuido de niñas y niños para la clase trabajadora, gratuitos o a bajo costo. Promovemos el aumento del tiempo en las licencias de paternidad para garantizar la participación de los padres en el proceso de crianza de los hijos, conceder mayores licencias para ambos padres en el seguimiento a sus niños en las labores escolares, en el cuidado médico etc. Pero ante todo, facilitar la autodefensa de las mujeres ante los agresores machistas.

Uno de los aspectos que más preocupa a la sociedad puertoriqueña es el pobre acceso a servicios de salud de calidad. En nuestro país hay una crisis de salud, que mantiene a miles de personas sin plan médico por que ni cualifican para la Reforma ni pueden costearse un plan privado. Los planes de salud establecen una diferenciación clasista, dependiendo del plan será la calidad del servicio. De la misma forma las corporaciones privadas como triple-s, first medical, MCS, las redes de hospitales HIMA, Pavia y otras son las corporaciones que más ingresos han generado en los últimos años. Mientras tanto el pueblo ve su salud deteriorarse. Proponemos la socialización de la medicina, o sea crear un sistema de salud único y universal que no tenga distinciones de clase y donde la salud sea un verdadero derecho humano. Para resolver el problema de forma inmediata, promovemos que el gobierno se convierta en pagador único de los servicios de salud eliminando los intermediarios que se enrriquecen a costa del pueblo.

Por el otro lado, la crisis energética que vivimos a nivel mundial no se puede resolver a base de combustibles fósiles. De que sirve hacer una inversión millonaria, endeudando al pueblo de Puerto Rico con emisiones de bonos y préstamos para costear una transición que supuestamente es temporera. El gobierno pretende convertir las termoeléctricas a gas natural y para ello ya han desperdiciado el dinero que podría haber servido para desarrollar verdaderas alternativas limpias y seguras. Hablar del gas natural como medida de transición no es otra cosa que demagogia. El costo del gas natural está aumentando a pasos agigantados, el proceso de extracción de este es altamente contaminante, la producción de gas natural a nivel mundial está relativamente estancada, y la demanda por gas natural está en aumento. Detrás del gas natural lo que hay son intereses económicos y políticos que buscan cambiar un monopolio por otro. Sabemos que el alto costo de la energía en Puerto Rico está relacionado con la privatización de la energía, con el despilfarro de fondos producto de la corrupción y por querer convertir la AEE en una ATH de los partidos en el poder. Es por ello que estamos en contra del gas natural, y nuestra consigna es ni tubo, ni tanque, ni boya, ni gas. En el MST estamos por el desarrollo y el estudio de las energías renovables como el viento, la luz solar, el uso de la energía de las olas, del calor de la tierra, de la biomasa y muchas otras. Esto requiere un verdadero compromiso e inversión económica, no se trata de sueños irreales sino de tecnologías realizables y disponibles en el mercado mundial. Si queremos la independencia tenemos que lograr la independencia energética, que no dependamos de mercados o monopolios extranjeros para nuestra sobrevivencia.

Exigimos también más empleos con justicia salarial, ahora. Cuando decimos que la crisis la paguen los ricos, nos referimos a que la política contributiva nacional estrangula a la clase trabajadora mientras le da via libre a los ricos y empresarios a llevarse jugosas ganancias del país. Más de 40 mil millones de dólares de ganancias capitalistas abandonaron el país en el 2010 y sin embargo las compañías siguen cesanteando trabajadores, siguen cortando horas, siguen dejando en la calle miles de familias puertorriqueñas. En los últimos 5 años se han perdido 150 mil empleos, y la participación laboral ronda el 45%. Más de la mitad de la población apta para trabajar no consigue trabajo, y los pocos que tenemos trabajo no hemos visto aumentos de sueldo considerables en los últimos 5 o 6 años. Todo lo contrario, el costo de la vida aumenta vertiginosamente. En comparación con los Estados Unidos, nuestros salarios son un 40% inferior. El nivel de explotación de la clase trabajadora puertorriqueña es enorme. El problema en Puerto Rico es, que no contamos con el poder para desarrollar una industria de la manufactura, o de la agricultura que por un lado produzca empleos y por el otro baje el costo de vida con productos de mejor calidad a un menor precio. Esto requiere la protección de productos locales de valor estratégico para la economía pero esa protección no puede estar dirigida al enrriquecimiento de unos pocos, sino que la protección venga acompañada de garantías salariales y de condiciones de trabajo dignas. La solución a nuestros problemas económicos está, sin duda, en la independencia y el socialismo.

Pero la lucha por estos reclamos necesitan de una organización nacional con fuerza suficiente para distanciarse de los sectores que siempre han dirigido las luchas de los trabajadores, pero que no salen de la conciliación con el estado, de la lucha legalista o de aquello que los medios noticiosos puedan tolerar. Hace falta una organización revolucionaria tanto en sus métodos, como en su discurso. Un partido, que represente una verdadera alternativa para la clase trabajadora y que promueva la organización de esta.

Es por ello que estamos aqui en la noche de hoy. Más importante que la marcha en si, será la huella que ya dejamos. El mensaje público está claro, el socialismo en Puerto Rico está vivo y tiene la fuerza suficiente como para existir independiente de otros sectores políticos. Los pasquines, los boletines, y las cuñas radiales son sólo el frosting de lo que nos proponemos en el MST como objetivo organizativo: la construcción de un Partido Clasista y Revolucionario de Cuadros de Combate.

Cada uno de ustedes queda emplazado, comenzando de mañana en adelante tienen la oportunidad de unirse a nosotros en la lucha por el socialismo. En el MST tenemos las puertas abiertas para que todas aquellas o aquellos que deseen luchar por un Puerto Rico independiente y socialista unamos esfuerzos en un mismo camino, respetando las diferencias.

En el Movimiento Socialista de Trabajadores no hemos perdido la fe, por ello estamos aqui y ustedes son la prueba. Para nosotros el socialismo si convence, el socialismo si organiza, y el socialismo si moviliza.

Muchas gracias.
Hugo J. Delgado-Martí
Portavoz
Movimiento Socialista de Trabajadores
1ro de mayo de 2012