¡No le llamen UPI, llámenle candela!

| Publicado el 3 octubre 2009

Foto por:Foto: RBS
Ian Camilo Cintrón Moya
Unión de Juventudes Socialistas (UJS-MST)

En las últimas semanas las(os) universitarias(os) le hemos dado nuevamente una lección al país de que la oposición y resistencia al gobierno insensible y abusador de Luis Fortuño, y sus amiguitos de cuello blanco, se hace luchando desde la calle. La UPR ha estado sumergida en una olla de presión a punto de explotar producto de las diversas manifestaciones, marchas, paros de los sectores laborales. Pero sobre todo por el exitoso y combativo Paro de 24hrs que realizamos estudiantes en el recinto de Río Piedras. Definitivamente que la UPI da candela.

La clase trabajadora y sectores oprimidos en Puerto Rico atraviesan momentos sumamente difíciles. El gobierno de Fortuño a través de la Ley #7 se ha dedicado a despedir a miles de trabajadores(as), a destruir los servicios públicos, a entregarle el país a industriales, empresarios, “desarrolladores” y banqueros, en fin, a sumergir en una de las más profundas crisis a todo aquel que tiene que sudarla para poder llevar el plato de comida a la mesa de su hogar.

Ante este devastador escenario el estudiantado universitario ha decidido no permanecer callado ni de brazos cruzados. El pasado lunes, 28 de septiembre, las y los estudiantes de la UPR de Río Piedras celebramos una de las asambleas estudiantiles más concurridas y enérgicas en los últimos años. Sobre 2,000 estudiantes participamos de la asamblea donde se aprobó realizar el paro de 24hrs contra la Ley #7, sus efectos sobre la UPR y en defensa de la educación pública. Además se aprobó un voto de huelga preventivo. A ejecutarse si se suscita uno de tres posibles escenarios: 1) que haya un Paro o Huelga General, 2) que la Coalición en Defensa de la Educación Pública Superior decrete una huelga, o 3) que si el estudiantado organizado en comités por facultad entiende existen las condiciones se celebre una asamblea estudiantil para determinar iniciar la huelga.

La nutrida participación estudiantil en la pasada asamblea, las mociones aprobadas en la misma, y el Paro de 24hrs han dejado claro que la Universidad, a diferencia de lo que algunos señalan, no es una burbuja o planeta aparte dentro de la sociedad y que las y los estudiantes universitarios de hoy no somos indiferentes ante las problemáticas sociales y políticas que afectan al país. Al contrario, demostramos nuestro descontento, indignación y disposición a la lucha militante contra los abusos y atrocidades de este gobierno dictatorial.

El Paro estudiantil debemos enmarcarlo dentro de la estrategia de un proceso que desemboque en una lucha ardua, prolongada y combativa en la UPR y en el resto del país. Proceso necesario e imprescindible si en realidad queremos derrotar las imposiciones y atropellos del gobierno a través de la Ley #7, defender y garantizar los derechos adquiridos y condiciones de vida de calidad, y ganar y conquistar nuevos derechos y mayor poder político.

La experiencia del Paro sirvió, entre otras cosas, para que muchas(os) estudiantes vivieran y conocieran de primera mano lo que es un proceso de lucha, se expusieran a los preparativos, coordinación y responsabilidades que conllevan una acción de esta naturaleza, y para radicalizar su conciencia política y social. Contribuyendo todo esto a incrementar su conciencia y voluntad de lucha, aspecto fundamental para el éxito y triunfo de cualquier proceso de cambio profundo. Además permitió que distintos sectores del movimiento estudiantil coincidiéramos en la acción y en la práctica, pudiendo realizar un trabajo unitario y solidario.

Para poder darle seguimiento al proceso que se inició con el Paro de 24hrs en la Universidad resulta de vital importancia la organización estudiantil democrática desde abajo, en comités de lucha por facultad y en los distintos recintos del sistema universitario. Así se podrán consolidar núcleos de trabajo que puedan: 1) profundizar en el análisis y entendimiento de la crisis y situación que vivimos, 2) convencer, acercar e integrar más estudiantes, 3) establecer canales de coordinación para hacer más efectivo el trabajo organizativo, 4) realizar los preparativos logísticos y técnicos correspondientes para una posible huelga en la UPR o Huelga General Indefinida. En resumidas cuentas, que los comités estudiantiles garanticen la continuidad y escalonamiento de la organización y lucha militante. De esta forma las y los estudiantes universitarios estaremos contribuyendo a construir, desde nuestros centros de estudio, al proceso de lucha para la transformación radical que Puerto Rico necesita.

Por último, el estudiantado universitario tiene una responsabilidad histórica en esta coyuntura. La juventud no somos solamente el futuro, sino que también somos el presente. Desatemos todas nuestras fuerzas, todas nuestras energías, toda nuestra furia, todo nuestro coraje, toda nuestra creatividad y nuestra determinación para vencer en esta lucha. Nuestro ejemplo debe servir de esperanza para despertar y activar la conciencia y espíritu de un pueblo trabajador que esta cansao’ de tantos abusos e injusticias. Los(as) jóvenes ya encendimos la llama. Ahora hay que propagarla y encenderla por todos los rincones de Puerto Rico para construir un país nuevo, distinto, justo, democrático, solidario y sobretodo que sea de los(as) que siempre lo han trabajado. ¡JUVENTUD, COMBATIENTE, LUCHANDO POR EL FUTURO Y EL PRESENTE