Organizando la rabia

Entre cuerpos y tribunales

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Este artículo se redacta a pocas horas de que se filtró un borrador por el Juez Supremo Federal, Samuel Alito, con el fin de derogar Roe vs Wade. [3 de mayo de 2022]

El feminismo es la idea radical que sostiene que las mujeres somos personas.

– Angela Davis

La noticia nos llegó a toda velocidad, desde la web, hasta los huesos. Digo nos desde les qué apreciamos la vida; se ha filtrado que el tribunal supremo de los Estados Unidos de América ha redactado lo que pudiera ser otro ataque terrorista hacia las mujeres, los hombres, las personas no binarias y la niñez que pudiera gestar embarazos. 

Mientras sacudo los brazos, los hombros y respiro profundo en intentos de soltar la ira y la tristeza, se me hace difícil identificar desde dónde y cómo empiezo a resistir.

Sé que la contestación fast pass a esta incertidumbre es sumarme a espacios, colectivas y organizaciones políticas que están llevando la lucha por la vida y por defender nuestra calidad de vida hoy y mañana: por les que estamos, quienes se han ido y quienes vendrán.

Sé que esta lucha la damos desde el amor, la ganamos desde la solidaridad y la continuamos organizades. 

Sin embargo, mi lucha, que sé que es la misma lucha de muchísimas personas desde estos archipiélagos en krísis la tengo en la voz, porque admito que a veces me tiembla. Entonces, dentro de mis tareas hoy está: hablar aunque me tiemble la voz. Y reconociendo las dimensiones complicadas en las que habitamos, me gustaría invitarles a hacer lo mismo. 

Hoy me toca decirle a las mujeres católicas cristianas contra el aborto que me criaron, y que sin quererlo me inspiraron a ser la feminista que soy hoy: estoy tan triste. Esta noticia me tiene el corazón partido.  

Hoy me toca decirle a los hombres católicos cristianos contra el aborto que me criaron y que respetaron mi humanidad antes de asignarme roles de género: esos jueces y ese borrador es otro intento más de organizar leyes criminales en contra de las niñas, las mujeres y toda persona gestante. 

Hoy me toca montarme en mi carro y darle un par de abrazos a las personas gestantes en mi vida que lo necesiten. 

Hoy me toca escribir desde el llanto y desde el amor. 

Y mañana tocará llegarle a la próxima manifestación, a la próxima reunión, a la próxima tertulia, desde la rabia y desde la justicia. Porque nos tenemos, luchamos y seguiremos apostando por la vida digna, lucha toda.