Utuado sigue batallando por la salud

Continuarán las protestas por la apertura total de hospital

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«Que el pueblo tenga que lanzarse a la calle a luchar por un derecho como la salud y la vida es un sinsentido humano y social.»

– Vox populi

Nuevamente la gente de Utuado se lanzó a la calle a exigir su derecho a la salud y a la vida.  Como parte de la lucha para que la sala de emergencias abra las 24 horas de los 7 días de la semana, este pasado sábado 19 de octubre utuadeñas y utuadeños piquetearon y consignaron frente a los portones del hospital.  Al son de plena se le recriminó a la familia Artáu – dueña del hospital – que su único objetivo y afán es el lucro a toda costa. Con las consignas de “Qué vergüenza, qué descaro/ lo que les importa son los chavos” y “En Utuado, qué desgracia/ no importamos si no hay plata”, entre otras, se dramatizó el profundo efecto negativo que ha traído  la privatización de la salud en el país.

Entre los mensajes ofrecidos uno de los que más indignó a las personas presentes fue el saber la cuantía de los ingresos generados en solo dos años por sus empresas.  Según el Book of Lists del Caribbean Business de 2018, las compañías First Medical Health Plan Inc. y Metro Pavía Health System Inc., ambas de la familia de Francisco J. Artáu, tuvieron unos ingresos ascendentes a 3,231.70 millones de dólares en los años de 2016 y 2017.  Esto en medio de una crisis económica de más de una década que ha afectado, supuestamente, a todos los sectores del país. Evidentemente, a los Artáu no. Y como ellos, a esa minoría que se vuelve cada vez más rica, mientras los bienes y servicios comunes siguen menguando.

Aún así,  dos representantes del hospital tuvieron la desfachatez de solicitar a integrantes de la Asamblea de Pueblo de Utuado que apoyaran al hospital en sus esfuerzos para que el gobierno le otorgara un subsidio, para entonces tratar de abrir la  sala de emergencias las 24 horas. Lloriqueo y chantaje.

Las expresiones repudiando el horario limitado a 16 horas de la sala de emergencias, a través de boletines, la radio y por altavoces alrededor del pueblo, además de las manifestaciones públicas, han provocado una actitud defensiva por parte de la administración.  Dicha actitud ha consistido en buscar apaciguar el disgusto general con un discurso hipócrita de su preocupación por la salud de la gente utuadeña.

De otra parte, la presencia de compañeras y compañeros de otros pueblos en solidaridad con la causa utuadeña tuvo el efecto de añadir aún mayor entusiasmo al carácter combativo de la actividad.  Hubo representantes de las asambleas de pueblo de Arecibo y Ponce y del Centro de Apoyo Mutuo de Bucarabones de Las Marías (CAMBU). Sin embargo, los grandes ausentes en apoyo a estos reclamos han sido los políticos electos.   No conocemos todavía la postura oficial, al respecto, del alcalde Ernesto Irizarry. El representante Abid Quiñones y los senadores Luis Berdiel y Nelson Cruz Santiago han sido parcos en sus comentarios. Como mucho, hablan de hacer investigaciones.  Investigaciones que sabemos que nunca se realizarán pues la idea malévola es dejar que el tiempo transcurra, haciendo que hacen y dejándolo todo igual. De hecho, es importante que el senador Berdiel aclare qué tuvo que ver en la autorización para el cierre parcial que el Departamento de salud le concedió al hospital, ya que su administrador, también Luis Berdiel, es su primo.

La lucha arrecia en lugar de desfallecer.  Por eso los y las utuadeñas se movilizarán hasta el Departamento de Salud a emplazar a su secretario, Rafael Rodríguez, para que deje sin efecto la autorización que le concedió al hospital para cerrar  un turno en la sala de emergencias.

El martes 29 de octubre a las 3:30 estaremos frente al Departamento de Salud firmes en la exigencia de disfrutar de unas facilidades hospitalarias 24/7.