Por
BREL1| Publicado el 2 febrero 2015
El PPD, que prometió transparencia, se niega a hacer público el informe de la Compañía KPMG sobre la llamada reforma contributiva. KPMG cobró $5 millones de fondos públicos por ese informe. Su argumento demagógico descansa en que no se cree un clima de desinformación y especulación que interfiera con el trabajo de los funcionarios y de no exponerlos constantemente a preguntas de la prensa. Del cinismo al fascismo, un paso es. Buscan ganar tiempo para desplegar una campaña publicitaria a favor del IVA, que de seguro será millonaria en beneficio de alguna agencia de medios. La misma ha sido anunciada para comenzar este lunes 2 de febrero.
Ya habíamos dicho que, se busca elevar abusivamente la carga contributiva a la inmensa mayoría del pueblo pobre y trabajador. Para esto, quieren imponer un Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) que ya se habla entre un 16% a un 18% en la compra de artículos. Al momento los medicamentos, servicios médicos, de hospital y laboratorios estarían sujetos al mismo ya que solo se ha hablado de excluir a las exportaciones, los servicios financieros y las rentas de vivienda.
Por otro lado, no se ha descartado por completo la eliminación del IVU que se compone de 7 centavos de cada dólar de los cuales 1 centavo va a los municipios. Alcaldes han estado negándose a la eliminación del 1% del IVU Municipal. Lo que representa una gran probabilidad de que se mantenga, por los préstamos que se han garantizado con el mismo. Además esa es una fuente de ingresos que permite a municipios utilizarla a su antojo. Es decir que por cada dólar que uno compre y que hoy se paga $1.07 con el IVU, podría pagarse $1.19 o más.
El gancho con que buscan engañar al pueblo trabajador, consiste en venderle la idea de eliminar el requisito de llenar planillas para contribuyentes solos cuyos ingresos sean menores de $35 mil anuales o de parejas que ganen menos de $70 mil/ año. Pero, naturalmente con ello eliminan las exenciones que en muchos casos conllevan reintegros a contribuyentes como la cantidad de dependientes, estudiantes universitarios, intereses hipotecarios y todos los demás. Pero tampoco esto es una garantía. Puede que se siga llenando planillas, pagando IVU más IVA. Recordemos que Acevedo Vilá aseguró que no impondría el IVU y lo hizo; por otro lado Fortuño prometió no despedir ningún empleado público e impuso la Ley 7 que lanzó a más de 30 mil a la calle. Así se ha institucionalizado la mentira de los candidatos de los partidos políticos de los ricos.