CAM Utuado

Utuado lucha por su hospital

| Publicado el 15 septiembre 2019

Manifestación en reclamo de una sala de emergencias abierta

Redacción
Bandera Roja

La Asamblea de Pueblo de Utuado se dejó sentir frente a los portones del Hospital Metropolitano de la Montaña con una movilización de protesta. Durante la mañana de este pasado sábado 14 de septiembre, utuadeñas y utuadeños, provenientes de diversos sectores y barrios del pueblo, se concentraron frente a los portones del Hospital Metropolitano de la Montaña en Utuado, para exigir a sus administradores que se reabra el turno de 11:00 p.m. a 7:00 a.m. de la sala de emergencias. La misma se mantiene cerrada en ese horario desde abril pasado. La preocupación general sigue en aumento tras las historias de espanto que se van conociendo según van pasando los meses y el hospital mantiene este patrón de cierre.

Para las y los participantes de la Asamblea del pueblo de Utuado, colectivo que organizó la actividad de denuncia y exigencia, la determinación de los dueños del hospital muestra una crasa falta de sensibilidad, de amor al prójimo y escaso interés por la salud y la vida humanas. Teresa Sepúlveda, quien participó como representante de la Asamblea de una reunión con la gerencia del hospital, mostró su indignación al escuchar a Ángel Álvarez, vicepresidente de Operaciones de Metro Pavía, empresa propietaria del hospital, defender su posición de que no es viable económicamente mantener la sala abierta en ese turno.

“Tuvo la desfachatez de decirnos que necesitaban que el gobierno les diera subsidios para poder abrir la sala desde las 11:00 p.m., cuando su empresa, entre las nativas, es una de las de mayores ganancias en el país”, añadió la Sra. Sepúlveda.

Sumamente indignante, y hasta sorprendente, resultó conocer que el Departamento de Salud le otorgó a este hospital la autorización para cerrar la sala de emergencias en ese turno durante un año.

‘’Primero acusamos al Departamento de Salud por no hacer nada al respecto de la situación del hospital, pero resulta que no solo no habían hecho nada, sino peor, le habían dado el aval para tal barbaridad.”, declaró Manuel Báez, participante de las asambleas de Utuado.

De acuerdo a las consignas y los comentarios recogidos, el problema de la privatización es muy preocupante para las personas asistentes a la actividad. Minerva Morales, evidentemente molesta, se quejó de que ¿para esto privatizaron los hospitales y la salud, para dejarnos morir por tres pesetas?

“Esta lucha va a seguir hasta que logremos restablecer el servicio en la sala de emergencia las 24 horas del día, los 7 días de la semana” aseveró Anjulee Matos, una de las portavoces de las Asambleas del pueblo de Utuado.

Panderos, sinfonía y güiro acompañaron las consignas y las plenas que exigían la inmediata reapertura de la sala en el turno mencionado. Una actitud entusiasta entre las y los manifestantes se mostró de principio a fin en la actividad, conscientes de saber que no es la última que tendrán que realizar.


A continuación el texto integro del Boletín #1
de la Asamblea de Pueblo de Utuado

Que nuestras vidas y nuestra salud no sean un negocio

Cerrar la sala de emergencias es un acto criminal

Desde hace varias semanas la ciudadanía utuadeña está enfrentando la penosa situación de tener un hospital con una sala de emergencias trabajando a medias. El hospital mantiene cerrada la sala de emergencias durante el turno de las 11 pm. La preocupación de nuestra gente está justificada. Le ha resultado angustiante a muchas compueblanas y compueblanos tener que soportar que sus seres queridos sufran por falta de servicios médicos adecuados y urgentemente.

Una de las responsabilidades de toda facilidad hospitalaria es proteger y mantener la vida humana. Triste y desgraciadamente el Hospital Metropolitano de la Montaña de Utuado no cumple con una de sus obligaciones. Sabemos de situaciones de emergencias médicas, que han ocurrido en Utuado después de las 11:00 pm, sumamente lamentables, que pudieron haberse evitado si la sala de emergencias hubiera estado disponible. Ha sido una decisión absurda, insensible e inhumana porque pone en riesgo vidas.

Es evidente que el cierre de la sala de emergencias responde a intereses económicos. Tenerla abierta en el turno de las 11:00 pm no genera suficientes ganancias a sus dueños, no es costo efectiva, pues entonces la cierran y que se fastidie la gente. Para los dueños del hospital es más importante seguir aumentando sus riquezas que la vida de cualquier utuadeño o utuadeña. No solo faltan a su deber moral, ciudadano y humano, si no que actúan ilegalmente. De acuerdo al Reglamento del Secretario de Salud, que regula los hospitales del país (capítulo XXI, artículo 1, sección 5), “El servicio de sala de emergencia de adultos y pediátricas estará disponible veinticuatro (24) horas al día, los trescientos sesentaicinco (365) días al año”.

La privatización – enemiga del pueblo

Es importante que recordemos que esta situación que vivimos en Utuado por la negligencia de los dueños del hospital tiene un nombre: privatización. Durante los años de 1980 y 1990 los servicios públicos de salud y medicina fueron cada vez empeorando como parte del plan para que nos molestáramos, nos quejáramos y luego viéramos con buenos ojos que se privatizaran. Nos hicieron creer que todo lo público era flojo, que no servía, que debíamos dejárselo a la empresa privada. El engaño fue total. Y se privatizó la salud y se vendieron los hospitales. Poco a poco nos hemos dado cuenta de que la salud se ha convertido en un negocio. Y que lo menos importante somos los y las puertorriqueñas. Por eso son tan altos los costos de medicinas, tratamientos, operaciones, laboratorios, estudios con nueva tecnología, trasplantes, quimioterapias, etc.

Es como si dijeran que la salud es para los ricos y las enfermedades y padecimientos para las demás personas, las pobres y las pobres que se creen de clase media. Imaginémonos entonces un Puerto Rico en que se privatizaran las escuelas, las universidades, la energía eléctrica, Acueductos y demás. Todos los servicios esenciales que debe proveer el gobierno quedarían convertidos en mercancías, en cosas que sirven solo para que dos o tres se hagan ricos a costa nuestra.

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